Por: Diego de Mizrahi
La segunda parte de la secuela de Marvel es aún más entretenida y tiene más acción que su anterior, Capitan America: El Primer Vengador. El film se desarrolla en Washington, donde el protagonista Steve Rogers (Chris Evans) se ve envuelto en una trama de conspiración junto con la Viuda Negra (la agente rusa Natasha Romanoff, encarnada con acierto por Scarlett Johansson) y lucharán junto con el Halcón/Falcon (Anthony Mackie) contra despiadados asesinos que quieren eliminarlos de la faz de la Tierra.
Samuel L. Jackson, uno de los grandes actores de Hollywood que en el film es el jefe de SHIELD (la agencia de inteligencia y antiterrorismo de los Estados Unidos) Nick Fury, sorprenderá con su rol. Lo mismo sucede con un malvado Robert Redford, que hace el papel del alto dirigente dentro de SHIELD, Alexander Pierce.
En Capitán América y El Soldado del Invierno, el supersoldado ya no estará tan sólo como en la primer parte y sus poco más de dos horas de duración entretienen, no sólo por la acción interminable y el suspenso que el film propone sino también debido a la presencia de un doble enemigo, uno que regresa del pasado de Rogers y un hombre poderoso que amenaza con controlar los hilos de la agencia.
El otro personaje que da pie al título del film y adquiere relevancia por la incertidumbre que despierta es El Soldado del Invierno (Sebastian Stan), que representa una amenaza para El Capitán América y sus compañeros, y que posiblemente aparezca nuevamente en una tercera entrega de la secuela de Marvel.
Como yapa, no perderse lo que sigue a los créditos, que derivará en nuevas historias del popular comic y dejará con intrigas a más de uno.