Por: Damián Blanco
Un nuevo video se volvió viral en la web. Un padre grabó a su hija desde su nacimiento hasta que cumplió 14 años.
Igual a la vieja tradición de marcar las altura de los niños cuando van creciendo en la pared, el cineasta holandés Franz Hofmeester registró a su pequeña a medida que pasaba el tiempo, desde el día 0 (28 de octubre de 1999). Cada vez que se encendía el led de la cámara de su padre, la niña interactuaba con ella.
A juzgar por las imágenes, la menor en ocasiones se divertía pero en otros momentos padecía y hasta lloraba al tener que pararse frente a la lente y cumplir con el proyecto audiovisual del que era parte.
Los medios que se hicieron eco del video – que hasta el momento superó más de 2 millones de visitas- publicado en Youtube como “fascinante”, “emocionante”, “impresionante”, cuando en realidad la idea roza lo morboso.
Es cierto que en los periodistas nos valemos de ese tipo de adjetivos y los usamos en la mayoría de las notas de videos virales. Aunque a veces es algo exagerado de nuestra parte, en ciertos casos resulta oportuno. Pero la obsesión de Franz y con Lotte, la protagonista del video, no debería ser calificada en esos términos.
“Grabé a Lotte cada semana desde su nacimiento. Cambiaba tan rápido que sentía la necesidad de documentar cómo era, para mantener intactos mis recuerdos”, explicó el creador sobre su idea.
“A veces no quieren que les grabe. Entonces les digo que sólo es un minuto, que me cuenten cómo les fue en el partido, si ganaron, y entonces consigo que se estén quietos y puedo hacer la grabación”, precisó en tanto sobre las dificultades técnicas a las que se enfrentó.
Como una copia fiel a la historia narrada en el film The Truman Show interpretado por Jim Carrey en 1998 (la pequeña del video nació al año siguiente), el cineasta holandés aplicó su experiencia audiovisual con su hijo Vicen, a quien grabó de 0 a 11 años y compaginó en 4 minutos para compartir con el mundo entero en Youtube.
Generando admiración o rechazo en el público, Franz logra su cometido de un “videorecuerdo”, ofrecer al mundo entretenimiento con un cortometraje algo extralimitado. Un ejemplo de lo que, en 1968, Andy Warhol anticipaba: “En el futuro todo el mundo tendrá sus 15 minutos de fama” ( ”In the future, everyone will be world-famous for 15 minutes”).