Ella se bajó el tema “Clavo que te clavo la sombrilla“, lo empezó a escuchar en el verano del 2008 y lo borró de su iPod recién en el invierno del 2011. El está feliz porque sabe que, aunque David Hasselhoff no sea tan gracioso como Gino Renni, es mucho mejor bañero, y eso, a las playas de Buenos Aires, les conviene. Ellos están organizando sus vacaciones, tres de los cinco quieren ir a Las Brótolas, no tienen idea qué es ni dónde queda, pero parece que ahí veranea Karina Jelinek.
Llega el calor, los creativos ponen el aire acondicionado en 22 y se disponen a pensar, el brief lo dice claramente: “NUESTRA publicidad del verano tiene que ser LA publicidad del verano”. Tremenda presión les metieron. Agarran dos o tres hojas, la birome, se sacan las zapatillas, uno también las medias, ponen los pies sobre la mesa y a pensar. Que la playa, que las vacaciones, que los ricos pirulines, que la primer quincena, que la Costa Atlántica, que palito, bombón, helado y siempre terminamos hablando de lo mismo: de aquellos recordados comerciales del verano. Continuar leyendo