El mediocampista colombiano del Real Madrid, James Rodríguez, es el modelo de una marca de ropa interior en cuya publicidad aparece en calzoncillos, como ya lo han hecho astros de la talla de Cristiano Ronaldo, David Beckham y Lionel Messi, entre otros.
La firma colombiana “Bronzini”, que contrató al futbolista, divulgó esta semana la campaña de la línea de ropa “J10 James”, que incluye calzoncillos, camisillas y pijamas, entre otras prendas.
James posó para la colección en una sesión de fotografías que se realizó en la ciudad de Medellín, semanas antes de unirse a su nuevo equipo español, agregó la información.
La colección salió a la venta el pasado viernes 29 de agosto, con la figura del goleador del Mundial de Brasil 2014.
“Elegimos a James Rodríguez como imagen de Bronzini Black por ser un hombre de estilo propio, que confía en sí mismo y sorprende en todo momento”, señaló en un comunicado Martín Nova, vicepresidente de Mercadeo del Grupo Éxito, que comercializará la línea de ropa interior de la que el futbolista es imagen.
El Real Madrid, con Iker Casillas, Marcelo, James Rodríguez, Xabi Alonso y Gareth Bale como modelos, presentó en el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu su tercera camiseta para esta temporada, de la marca Adidas, con una innovadora apuesta por el color negro y dos dragones entrelazados.
El diseñador japonés Yohji Yamamoto ha sido el encargado de dar forma a esta sorprendente casaca, tras la apuesta por el rosa en la segunda camiseta del club “merengue” para la temporada 2014/15. En esta ocasión, la entidad presidida por Florentino Pérez presentó una indumentaria negra con las rayas blancas en los hombros de la marca y una novedad en el dibujo de fondo con dos dragones entrelazados.
Son el dragón rey, símbolo de grandeza, gloria y poder, junto al dragón pájaro, en representación de la resistencia y la agilidad. La expectativa en las cercanías del estadio, donde se amontonaron cerca de un centenar de fanáticos madridistas y en la tienda oficial del club fue máxima para conseguir la nueva prenda.
“Tanto el ave como el dragón indican el resurgir de los últimos años del Real Madrid, y la fuerza con la que este año intentamos conseguir la Liga de Campeones”, aseguró el capitán Casillas tras posar con su camiseta, también nueva, de color naranja completa y con el diseño de dragones sobre el pecho.
Xabi Alonso también elogió el nuevo diseño: “Me gusta mucho, es muy innovadora pero al mismo tiempo tiene esa sencillez que a mi me gusta. Estoy convencido de que a la gente le va a gustar mucho, y ojalá nos pueda dar esa fuerza del dragón en la Champions”.
El mediocampista del equipo dirigido por Carlo Ancelotti se puso como desafío repetir la obtención de la Liga de Campeones con la nueva indumentaria. “Durante años hemos estado peleando por la Décima y lo hemos disfrutado mucho. Pero no se vive del pasado y ahora el objetivo es revalidar el título, aunque es complicado. Si nadie lo ha conseguido será por algo, pero igual vamos a ir a por ello”, afirmó el futbolista.
Asimismo, el galés Gareth Bale también recordó el éxito vivido en Lisboa, en una final en la que convirtió un gol de cabeza. “Para todos nosotros, ganar la Champions fue fantástico pero como ha dicho Xabi vamos a mirar hacia el futuro. Tenemos que intentar hacer historia”, señaló el británico.
El ex volante ofensivo del Tottenham agregó que “marcar en una final, sobre todo si es en la Champions, es uno de los mayores sueños de un futbolista. Ahora, en una nueva temporada entendemos que el Real Madrid siempre tiene presión por luchar por el título, pero nos gusta la presión. Intentaremos volver a ganar este año”.
Por último, Marcelo dijo que la flamante casaca negra “es muy bonita y combina”, con su apuesta por los tatuajes, y también recordó la final de Lisboa. “Recuerdo que en la final de la Décima tenía mucha rabia por no haber empezado jugando, y tuve que salir a dar lo mejor. Los recuerdos son muy buenos”, indicó.
El lateral izquierdo brasileño concluyó asegurando que “me identifico con los dos dragones, pero creo que algo más con la fuerza del dragón rey” dijo entre risas el futbolista que participó del último Mundial en su país, provocando la carcajada de sus compañeros.
Búsqueda de reconocimiento de los demás, ya sea a pequeña, mediana o gran escala. Esto es lo que buscan los multimillonarios que desembarcan en el fútbol europeo, y para ello nada mejor que puntos estratégicos del Viejo Continente donde colocar su dinero. Y vaya si algunos cumplen con creces su objetivo, teniendo como exponentes más exitosos al Chelsea del magnate ruso Roman Abramovich y al Manchester City, propiedad del jeque Mansour bin Zayed Al-Nahyan, miembro de la familia real del emirato de Abu Dhabi.
Pero la ya conocida fascinación de los rusos y árabes por Inglaterra ahora se suma un lugar de ensueño hacia el que enfocan las luces de neón: Mónaco. El Principado ubicado a orillas del Mediterráneo atrae por el glamour de sus casinos, yates y la familia real Grimaldi, pero también por las exenciones impositivas de las que gozan sus residentes. Un aspecto clave que sedujo al oligarca ruso Dmitry Rybolovlev, que se dedica a la exportación de fertilizantes fabricados a base de potasio.
Este ex médico adquirió hace dos años el 66% del AS Mónaco en 100 millones de dólares, quedando el resto de las acciones en manos del Principado. La primera meta fue devolver al equipo a la primera división francesa, algo que consiguió hace pocas semanas. Una vez concretado esto puso manos a la obra en el armado de un plantel que le permita disputar el título de la Ligue 1, cuya obtención le permitiría volver a codearse con los mejores de la región en la Champions League.
La política de refuerzos estelares comenzó con la contratación del colombiano James Rodríguez por 45 millones de euros y del portugués João Moutinho por 25 millones de la misma moneda, ambos procedentes del Porto. Más tarde se sumó el también lusitano Ricardo Carvalho, pero el gran golpe de efecto concretado por el club monegasco fue el arribo del goleador colombiano Radamel Falcao, por quien se le pagaron 45 millones de euros al Atlético de Madrid.
Sin embargo, nada parece conformar a Rybolovlev, y por eso ya puso su mira en uno de los dos mejores futbolistas del mundo: Cristiano Ronaldo. Al parecer el crack portugués será tentado con un contrato de cinco temporadas por nada menos que… 100 millones de euros. Una escalofriante cifra que incluso supera a la que piensa ofrecerle el Real Madrid para lograr que el delantero permanezca en sus filas a partir de 2015, cuando vencerá el vínculo que los une.
Pero no todas son rosas en el andar del multimillonario ruso por el fútbol galo. Su ya astronómica inversión, sumada a una muy similar de su competidor París Saint Germain, ha provocado el recelo de sus rivales a nivel doméstico, que no quieren enfrentarse a un club que goza de las ventajas fiscales que ellos no tienen. Una alternativa sería que la entidad monegasca le pague una millonaria compensación al conjunto de sus competidores, aunque esta opción fue descartada de plano por Rybolovlev, que la considera un chantaje.