Para aquellos que somos mayores de 30, tenemos la suerte de haber conocido tecnologías que las generaciones venideras ni imaginarían de su existencia.
Una de éstas “tecnologías” son los teléfonos fijos de marcación de rosca, el antepasado de los actuales teléfonos inalámbricos y que en su momento ya mostré como era nuestra vida con ellos en comparándola con la que actual dependientes de un smartphone.
Como decía si eres mayor de 30 es muy probable que a día de hoy si te ponen delante uno de estos dispositivos de marcación por rosca, aún recuerdes la manera de realizar una llamada, pero que ocurrirá si la prueba la hacemos con dos adolescentes nacidas en la actual sociedad de la información, cuya vida gira en torno a un smartphone.
El vídeo hace tiempo que se publicó en la red, pero el otro día lo volví a encontrar y pensé que era idóneo para insertarlo en #tecnoymedia pues refleja perfectamente como la tecnología actual está inmersa en nuestro día a día.
Viendo el vídeo me doy cuenta de como nuestra dependencia de apps, tablets y smartphone, también ha conllevado a la transformación de ciertos músculos, como por ejemplo el papel que ahora desempeña el dedo pulgar en las tareas de nuestro quehacer diario sería inpensable hace décadas, cuando existían teléfonos como los del siguiente vídeo…