Aunque nos parezca extraño o sea desconocido para muchos, nuestras fosas nasales y nuestra mente tienen una relación mucho más íntima de lo que imaginamos…
Según la neurología, la fosa nasal derecha está vinculada con el hemisferio cerebral izquierdo, que es lógico y activo –es decir, es el que calcula, organiza, planifica, observa las cosas a nivel micro, etc–; mientras que la fosa nasal izquierda está vinculada al hemisferio cerebral derecho que es creativo y pasivo -es “el lado del artista”, de quien ve y piensa a nivel macro pero no retiene datos específicos; entre otras funciones-.
Naturalmente, alrededor de cada 4 horas, una de las dos fosas nasales predomina sobre la otra estimulando el hemisferio cerebral del lado contrario; y de esa manera nuestros hemisferios se mantienen en equilibrio (observa en diferentes momentos del día qué fosa nasal esta predominando). Sin embargo, no solo cada persona tiene sus tendencias, sino que también puede una de las fosas estar más tapada que la otra impidiendo así el paso del aire.
Conociendo nuestra fisiología, sabemos que podemos estimular, por así decirlo “a voluntad”, el hemisferio cerebral que necesitemos según requiera el momento o, por ejemplo, podemos utilizar este saber para relajarnos cuando no podemos parar de pensar.
Y el yoga, ¿qué?
En el Yoga, se expresa justamente que la fosa nasal derecha es “solar” o activa, en tanto que la izquierda es “lunar” o pasiva; y se utiliza la técnica de respiración llamada Nadi Shodana, respiración alternada, para equilibrar ambos hemisferios encontrando balance en el sistema nervioso. Esta respiración es ideal para las personas con mucha ansiedad o estrés, como los estudiantes, pero es también recomendable para toda persona que busque una mayor armonía en su actividad cerebral.
¿Cómo la hago y cuánto tiempo?
Tiempo sugerido: 5 – 15 minutos. Puedes colocarte una alarma para saber cuando finalizar.
Técnica (ver foto):
1.La mano derecha será que utilizarás para esta respiración. Llevas el dedo índice y el medio hacia la palma y tapas con tu dedo pulgar tu fosa nasal derecha y con tu dedo anular la fosa nasal izquierda.
2.Paracomenzar, tapas una fosa nasal e inhalas de manera lenta y profunda por la otra.
3.Luego, obturas las dos y mantienes el aire el tiempo que te resulte cómodo.
4.Exhalas por la fosa nasal contraria en forma lenta y profunda.
5. Por esta misma fosa nasal, comienzas nuevamente el ciclo.
Esta técnica es muy efectiva cuando la practicas de manera constante. La puedes utilizar como herramienta para armonizarte en cualquier momento del día, tanto en tu casa como la oficina, en un parque o en donde puedas tomarte esos minutos para respirar profundo y darte cuenta de que en tus manos tienes una herramienta más para encontrar el #WellnessUrbano.
PAZ,
Luana
Conoce más sobre mi Coaching personal: www.luanahervier.com
Me encuentras en Facebook, Twitter y YouTube